Aunque no se ha denominado como un funeral de Estado, se prevé la presencia de más de 120 cardenales, 400 obispos y unos 4.000 sacerdotes concelebrando con el papa Francisco en la misa exequial.
La capilla ardiente de Benedicto XVI, que falleció el pasado sábado a los 95 años, se cerrará este miércoles después de tres días y de que cerca de 135.000 personas se despidieran del papa emérito, mientras se ultiman los preparativos del funeral de este jueves en la plaza de san Pedro.
A partir de las 7 (hora local) de hoy miércoles, varios cientos de personas empezaron a entrar ordenadamente a la Basílica, para despedirse de Benedicto XVI, en el último día destinado a ello.
Las exequias
“Oh Dios, que en el plan de tu providencia llamaste a tu siervo Benedicto para guiar la Iglesia, concédele participar en el cielo de la gloria eterna de tu Hijo, a quien sirvió como vicario en la tierra”. Con esta oración colecta que precede a la Liturgia de la Palabra, el papa Francisco evocará al pontífice emérito Benedicto XVI, en la misa exequial que presidirá el jueves 5 de enero, a partir de las 9.30, en el patio de la Basílica de San Pedro.
Más de 120 cardenales, 400 obispos y casi cuatro mil sacerdotes concelebrarán con el Papa, además del cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio, que será uno de los concelebrantes principales. La Prefectura de Roma dio a conocer que se espera a más de 60 mil fieles.
Delegaciones oficiales y representantes ecuménicos
Para el funeral de Benedicto XVI -precisaron los Medios vaticanos- se espera a las delegaciones oficiales de Alemania e Italia, así como a numerosos representantes ecuménicos, entre ellos los Metropolitas Emmanuel de Calcedonia y Policarpo de Italia, por el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, y el Metropolitano Antonio de Volokolamsk, presidente del Departamento de Relaciones Eclesiásticas Exteriores del Patriarcado de Moscú. También, a obispos de muchas Iglesias ortodoxas de Europa, América y Asia. También estará presente el moderador del Consejo Ecuménico de las Iglesias, el obispo Heinrich Bedford-Strohm.
El miércoles por la noche se cerrará el ataúd
La tarde de este miércoles, después de las 19, una vez que se hayan retirado las últimas personas del público, se sellará el féretro de ciprés y, según la tradición, se colocarán en un cilindro metálico las medallas y monedas acuñadas durante el pontificado de Benedicto XVI, el palio que usó como arzobispo metropolitano de Munich y de Roma y, a continuación, el “rogito”, es decir, el texto que describe brevemente el pontificado del difunto papa.
La primera oración de los fieles por el Papa emérito, en alemán
El féretro con los restos mortales de Benedicto XVI será trasladado al patio de la Basílica de San Pedro a las 8.45 del jueves, para el rezo del Santo Rosario por parte de todos los fieles. Después, la celebración de las exequias del papa emérito, según aclaró el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, seguirá el modelo de las exequias de un pontífice reinante, con algunos elementos originales, algunas adaptaciones y otros elementos que estarán ausentes. Por ejemplo, no se realizarán las súplicas finales de la diócesis de Roma y de las Iglesias orientales, propias de un papa reinante, y las lecturas, en español e inglés, también serán diferentes. La primera de las cinco oraciones de los fieles, en alemán, será “por el papa emérito Benedicto, que se durmió en el Señor, para que el Pastor eterno lo acoja en su reino de luz y de paz”. Las otras peticiones serán en francés, árabe, portugués e italiano.
Las oraciones del ofertorio y después de la comunión
En la oración de las ofrendas, el cardenal Giovanni Battista Re rezará así: “Por el poder de este sacrificio, haz que tu siervo Benedicto, a quien has puesto a la cabeza de tu rebaño como pastor principal, sea recibido en el cielo entre los santos obispos”. Y finalmente, en la oración después de la comunión, el Papa Francisco, en nombre de toda la Iglesia y de los fieles presentes, pedirá al Señor “que tu siervo Benedicto, fiel dispensador de los divinos misterios en la tierra, alabe tu misericordia en la gloria eterna de los santos”. Los coros presentes serán el de la Capilla Sixtina, dirigido por el Maestro Marcos Paván, y el coro a cargo del Maestro Jafet Ramón Ortega Trillo; el organista será el Maestro Josep Solé Coll.
El rito de despedida y el entierro en las Grutas Vaticanas
Al final de la celebración eucarística, el papa Francisco presidirá el rito de la Ultima Commendatio (la última recomendación) y la Valedictio (la despedida). A continuación, el féretro del pontífice emérito será trasladado a la Basílica de San Pedro y, posteriormente, a las Grutas Vaticanas para su entierro. Durante un rito, de forma privada, se pondrá una cinta alrededor del féretro, con sellos del Capítulo de San Pedro, de la Casa Pontificia y de la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas. A continuación, el ataúd de ciprés se colocará dentro de un ataúd de zinc más grande, que se soldará y sellará. Este féretro de zinc se introducirá a su vez en una caja de madera, que se instalará en el lugar que antes ocupaba, hasta su beatificación, el féretro de San Juan Pablo II.
Las imágenes transmitidas en Mundovisión
Quienes sigan la celebración por televisión y la web, podrán ver las imágenes en directo de la salida del féretro de Benedicto XVI desde el interior de la Basílica de San Pedro hasta el patio de la misma. Luego, continuarán las imágenes de la misa hasta el regreso del ataúd al interior de la Basílica Vaticana, tras una hora y 45 minutos aproximadamente de transmisión en Mundovisión. Hasta la tarde de ayer, martes 3 de enero, eran más de 600 los periodistas acreditados en la Oficina de Prensa de la Santa Sede para la cobertura del funeral del papa emérito.
