El Papa Francisco envió sus condolencias por la muerte de la Reina Isabel II de Inglaterra, asegurando que está “profundamente entristecido” y que se unirá en oración por su “eterno descanso”, encomendando “su noble alma a la bondad misericordiosa” de Dios.
“Profundamente entristecido al enterarme de la muerte de Su Majestad la Reina Isabel II, ofrezco mis más sinceras condolencias a Su Majestad, a los miembros de la familia real, al pueblo del Reino Unido y a la Commonwealth”, escribió el Papa Francisco en un telegrama enviado a Rey Carlos III, hijo de la Reina Isabel asumirá la corona británica.
El Papa dijo que se unirá a “a todos los que lloran su pérdida para orar por el descanso eterno de la difunta Reina”.
“Encomendando su noble alma a la bondad misericordiosa de nuestro Padre Celestial, le aseguro a Su Majestad mis oraciones para que Dios Todopoderoso lo sostenga con su gracia inagotable al asumir ahora sus altas responsabilidades como Rey”, fue el deseo final del Papa Francisco.
“Sobre ti y todos los que atesoran la memoria de tu difunta madre, invoco una abundancia de bendiciones divinas como prenda de consuelo y fortaleza en el Señor”, concluye el telegrama.
La Reina Isabel II de Inglaterra, cabeza de la Iglesia Anglicana, falleció a los 96 años este jueves 8 de septiembre en el día de la Natividad de la Virgen María.
Los obispos del país pidieron por “el descanso del alma de Su Majestad” y que sea “recibida en la presencia misericordiosa de Dios”.
A primera hora de este jueves toda la Familia Real arribó a Balmoral para acompañarla en sus últimos momentos de vida.
La cadena informativa pública británica BBC interrumpió su programación, como señal de duelo cambió su logo con color negro, y sus presentadores empezaron a utilizar trajes y corbatas negras para las transmisiones.