Acciones humanas: Moral

La moral se ocupa de las acciones humanas. Las verdaderas acciones humanas son aquellas que dimanan de la libre voluntad del hombre.

¿Pero el hombre es verdaderamente libre? Ciertamente sí, inequívocamente: puedo querer una manzana o una pera, o también no querer nada. Los distintos condicionamientos (familia, escuela, costumbres) en la mayoría de los casos no quitan la libertad, pero la pueden limitar. Por lo tanto es necesario afirmar que la libertad de base permanece, y todos tenemos la experiencia, no obstante los condicionamientos, de que podemos obrar según nuestro arbitrio.

Admitiendo, pues, que la verdadera acción humana es aquella que es libre, la moral no mira si nuestra acción es importante o no, si es eficaz o no, si es aplaudida o no. Lo que cuenta para la moral es si la acción que estamos realizando es buena o mala. Decir por tanto que las acciones son morales o inmorales equivale a decir que las acciones son buenas o malas.

Todas las parábolas de Jesús, en particular la del buen samaritano (Lc. 10, 30ss), indican cuáles son las acciones buenas que se han de hacer, y cuáles las malas que se han de evitar.

¿De qué acciones se ocupa la moral?

La moral se ocupa de las acciones humanas, es decir, de aquellas acciones que el hombre realiza con conciencia y deliberación, y que por lo tanto implican su libertad y su responsabilidad.

¿Existen factores que pueden mermar la libertad y la responsabilidad del hombre?

La libertad y la responsabilidad del hombre pueden ser disminuidas o anuladas por la ignorancia, por la violencia, por el temor y por varios condicionamientos psíquicos o sociales.

¿La ignorancia atenúa siempre la responsabilidad de una culpa?

La ignorancia atenúa y hasta quita la responsabilidad de una culpa en la medida en que ella misma no esa culpable.

¿En base a qué podemos decir que una acción humana es buena o mala?

La bondad o no de una acción humana depende de tres factores: del objeto, de las circunstancias y del fin.

¿Si se sigue la propia conciencia (y por tanto si es de buena fe), pero se realizan de hecho acciones objetivamente malas, se comete pecado?

Se comete pecado cuando se es culpable de la propia ignorancia y de la consiguiente incapacidad de dar una correcta valoración de las propias acciones. Y esto ocurre a menudo, porque no todos se preocupan de instruirse y de educar su conciencia.

¿Cómo se educa la propia conciencia?

Siguiendo y profundizando la enseñanza de la Iglesia, que es nuestra madre en la fe y ha sido encargada por Nuestro Señor Jesucristo de instruir a los bautizados en la verdad.

Artículos Relacionados